La persistencia de la memoria Salvador Dalí, 1931
Ella que era sombra esperaba impaciente que las 24 horas pasaran, primero la hora 1 se deslizó rápida por su lado, sin siquiera ver que ella estaba allí sentada, luego la hora 2, corriendo y tratando de alcanzar a la primera.
Las horas 3 y 4 venían conversando del mundo, la lejanía y el destino.
La hora 5 refunfuñaba por lo atrasada que iba y el mucho trabajo que siempre tenia que hacer. la hora 6 reía a carcajadas al ver a la sombra como esperaba por algo que todos sabían era irreal.
La hora 7 (muy seria ella) se paseaba de un lado para otro mirando su séptimo reloj.
La hora 8 toda coqueta le cerraba un ojo a la hora nueve, mientras la hora 10 discutía con la hora 11 por que está se había quedado dormida (es que la hora 11 sufría de insomnio)
La hora 12 no estaba pues había sido invitada a almorzar por un relojero que la frecuentaba. La hora 13 que siempre vestía de negro lloraba en un rincón al ver a la sombra sentada esperando. La hora 14 se miraba en un espejo.
la hora 24 se había perdido y con ella todo lo que la sombra esperaba.
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